2000 Maníacos : La Sangrienta Venganza de Rednecks y Campesinos

Anoche tuve la oportunidad de ver uno de los clásicos pioneros del gore del fundador del género Herschell Gordon Lewis, 2000 maníacos (2000 maniacs) que mi hermano tuvo la oportunidad de adquirir en Argentina cuando hace poco viajo a ese país a asistir al espectacular concierto de Iron Maiden, película que pertenece a una colección denominada “Obras Maestras del Terror” lanzada para suerte de los argentinos amantes del género por una distribuidora local en ese país con el claro fin de difundir clásicos conocidos y no tan conocidos del género.

La película, como muchas obras de culto del género, detenta un escaso presupuesto, primitivos efectos especiales y un amateurismo que raya casi en lo risible, pero obviamente no se podía esperar más del proyecto sobre todo por el hecho de también tener involucrado en el a otro de los desvergonzados mercenarios del cine de explotación de esa época como lo es David F. Friedman, sin embargo el resultado es un producto que me pareció entretenido, efectivo para la época y hasta divertido, en el que Gordon Lewis de alguna manera parodia las tensiones entre la gente de campo y ciudad, y da rienda suelta a todo su arsenal explotativo para conjugar un argumento demencial con una sangrienta puesta en escena que debió escaldar y horrorizar a más de uno en la época.

La historia trata de un pequeño pueblo sureño, llamado Pleasant Valley, que cada 100 años aparece en el mapa para celebrar un centenario más de su aniquilación a manos de un grupo de soldados Yankis norteños en la época de la guerra de Secesión norteamericana, para esto dos típicos Rednecks de aspecto retardado se encargan de colocar carteles de desvío en la carretera principal con el objetivo de hacer que distraídos viajantes se desvíen hacia el pueblo, donde con engaños son retenidos, para luego ser obligados a participar en una bizarra festividad en la que son asesinados para saciar la sed de venganza del pueblo, y pues claro como habrán adivinado sus 2000 habitantes no son nada más y nada menos que espectros que vuelven a la vida cada 100 años para cobrarse su venganza e incluso pasar un entretenido rato de diversión entre ellos.

El inicio de la película es de lo más inusual, dando la impresión de ser una película de cine mudo en la que apreciamos a los dos Rednecks tarados gesticular y jugar con los carteles de señalización en la carretera para lograr que los autos de paso tomen un falso desvío que los llevará al pueblo, de esta manera logran engañar un primer coche en el que viajan 2 parejas y luego un segundo coche en el que viaja una mujer (Terry) llevando a un profesor (Mr. White como el Harvey Keitel de Reservoir Dogs o el personaje de Casino Royale) que iba de paso hacia una convención de maestros en Atlanta y cuyo coche se había averiado en la carretera.

Así pues, cuando los viajantes llegan al pueblo son acogidos con una extraña hospitalidad en la calle principal del mismo, donde los recibe un extraño, gordo y colorado personaje que se presenta como el alcalde del pueblo, rodeado de toda una muchedumbre que celebra la llegada de los visitantes, los cuales son convencidos que son los huéspedes de honor de la celebración del centenario del pueblo por lo que son atendidos y alojados sin coste alguno para ellos, no adivinando por el momento las macabras intenciones de los pueblerinos.

Entre los extraños personajes del pueblo resaltan como ya he mencionado el gordinflón y colorado alcalde (Mayor Buckman), los dos rednecks tarados (Rufus & Lester), pero además un grupo de niños liderados por un pequeño niño rubio llamado Billy y que tienen como pasatiempo ahorcar gatos con unos curiosos mini lazos de horca adaptados para el tamaño del cuello de los felinos (de hecho al inicio de la película vemos al niño rubio estrangular un gato negro con este lazo), el grupo musical del pueblo, compuesto por 3 miembros (Al parecer The Pleasant Valley Boys, un grupo verdadero en la vida real), los cuales se encargan de musicalizar casi toda la película con sus alegres melodías country estilo Hillbilly, y finalmente el galán y la zorra del pueblo (Harper & Betsy) que se encargan de seducir y separar a las parejas de visitantes para hacer más fácil su ejecución (Debo indicar que el galán del pueblo era un gordito embutido en unos tejanos a punto de reventar, de gestos risibles y movimientos torpes, que supongo quiso pasar por fornido en la época, no sé si sería capaz de seducir a alguien en la vida real, habría que consultarle a alguna fémina que haya visto la película al respecto, eso sí, Betsy me pareció caliente y sexy).

Así pues, separados por el Harper y Betsy, las dos parejas del primer coche son ejecutadas, y es así que el gore aparece por primera vez en la película en el minuto 27 de esta, en el que una de las mujeres del grupo, una rubia también con aspecto de zorra, es seducida por Harper y llevada a un paraje solitario en el cual se besan apasionadamente, luego de lo cual Harper saca un filoso cuchillo con el que le rebana un par de dedos a la mujer supuestamente de manera accidental, luego la escena cambia y vemos a la mujer con la mano vendada en la oficina del alcalde donde fue llevada para ser atendida por el supuesto accidente, pero es allí donde es cruelmente ejecutada con tintes un tanto orgiásticos, siendo atacada y tendida sobre la mesa por el alcalde, Rufus, Lester y Harper, donde es finalmente Lester quien la liquida partiéndole un brazo con un hacha a la altura del hombro (en una curiosa toma que es la portada del Dvd que poseo donde podemos apreciar el rostro babeante de subnormal de Lester al momento de ejecutar a la mujer).

La segunda víctima es la pareja de la primera rubia ejecutada, un individuo con pinta de golfo de la época, flaco y con el típico polo blanco apretado estilo “Días felices”, el cual siendo aficionado al trago es seducido y emborrachado por Betsy, luego de lo cual sufre quizá la muerte más terrible del grupo al ser despedazado estilo Túpac Amaru II por 4 caballos que tiran de un lazo atado a sus extremidades, donde se nos muestra una toma en la que un brazo es arrancado de cuajo por uno de los caballos, y luego otra donde lo que cede es el punto medio de su cuerpo partiéndolo por la mitad y mostrando el cuerpo separado del torso desde la cintura para abajo con las vísceras fuera, algo nada agradable de ver por cierto y que hasta ocasiona que la mayoría de los pueblerinos se eche para atrás de seguir con la celebración, horrorizados por la cruel ejecución (hasta la música se paraliza), por lo que Rufus tiene que encargarse de azuzarlos y animarlos obligando a tocar a los músicos nuevamente.

La tercera y cuarta víctimas son la segunda pareja, la de aspecto más tranquilo y de rasgos más agradables y convencionales, la cual es ejecutada en una sangrienta y peculiar feria, el hombre es obligado a jugar el juego de barril colina abajo, donde como su nombre indica es obligado a meterse dentro de un barril el cual es empujado rodando colina abajo, pero con el detalle de que el alcalde se encarga de clavar largos y afilados clavos a los costados del barril por lo que se pueden imaginar como termina el cuerpo del desgraciado a llegar el barril al pie de la colina; la mujer es atada de pies y manos sobre una plataforma debajo de una roca gigantesca, la cual forma parte de un dispositivo tipo juego de feria en la que se le arroja pelotas a un blanco que al ser acertado libera la roca sobre el cuerpo de la mujer, así pues los pueblerinos empiezan a desfilar uno tras otro con mala puntería, pero es finalmente Rufus quien le acierta al blanco (graciosamente comenta que su puntería debería llevarle a las ligas mayores) haciendo que la piedra aplaste el cuerpo de la infortunada mujer.

Mientras tanto, White, que es el más desconfiado del grupo, se encarga de investigar suspicazmente los alrededores encontrando una extraña losa conmemorativa que explica la verdad , por lo que huye con Terry hacia los garajes tratando de encontrar su coche y poder escapar del pueblo, en el camino atraviesan unas zonas pantanosas donde son perseguidos por el galanaso Harper quien sucumbe al caer en arenas movedizas, es así que llegan hasta los garajes y allí son ayudados por Billy, el distraído niño rubio mata-gatos quien les proporciona las llaves del coche, con lo que finalmente logran huir por los pelos del pueblo que ya había adivinado sus intenciones, luego de lo cual se dirigen hacia la comisaría del pueblo más cercano para contar su extraño relato, donde un incrédulo policía los acompaña a investigar los alrededores pero como era de esperarse no encuentran ya rastros del camino y mucho menos del pueblo (el policía les hace la acotación de que los había acompañado en lugar de mandarlos al manicomio solo por el hecho de que efectivamente allí había existido el pueblo en cuestión pero que había desaparecido durante la guerra de secesión).

Finalmente la pareja descubre que se han enamorado y Terry acompaña a Mr. White a su convención en Atlanta en un final feliz para ellos, mientras que Rufus y Lester sentados sobre la hierba comentan sobre como se divirtieron en este centenario y especulan sobre las cosas que vivirán y verán en el siguiente (quizá hasta veamos cohetes y naves le dice uno al otro) que esperan que sea tan bueno o mejor que este, luego se levantan y se internan en el bosque, no sin antes dar un ruidoso silbido que hace que Harper se levante estilo zombi de las ciénagas que lo habían tragado y así conversando amigablemente las tres figuras se desvanecen en el bosque.

Para rematar, en el colmo de la excentricidad, la película termina con la presentación de sus orgullosos protagonistas estilo Hollywood, en una típica secuencia que nos permite asociar el nombre con el rostro de cada uno de los actores; es pues una curiosa película que recomiendo a todos aquellos que quieran conocer los inicios de este singular género denominado gore.