sábado, 5 de diciembre de 2009

El Máldito - Tres Días Muerto con el Noir Satánico

Hace poco llego a mis manos una historieta que me sedujo irremediablemente desde su propuesta y argumento: El mundo del hampa esta dominado por familias de mafiosos gobernadas por demonios, de manera que el tráfico de blancas, alcohol y drogas es una tapadera para algo mucho mas siniestro: el tráfico de almas; todo esto teniendo como escenario un universo fascinante que pareciera un alucinado Crossover entre el Noir Hard Boiled de Dashiel Hammet y el Horror Cósmico de H. P. Lovecraft.

Siendo un entusiasta de la Novela Negra, en particular de la obra de dos de sus más grandes exponentes como lo son Dashiel Hammet y Raymond Chandler, así como del Horror Clásico de la mano de H. P. Lovecraft y Edgard Allan Poe, sencillamente la propuesta de “El Maldito, Tres Días Muerto” (The Damned), obra de Cullen Bunn (guión) y Brian Hurtt (dibujo), es irresistible.

El protagonista de esta magnífica historieta es Eddy Morgan, un avispado truhán de poca monta que parece tener un imán para los problemas, lo cual lo lleva a tener numerosos entripados con todas las familias de mafiosos de la ciudad, resultante de esto es que ha perdido su alma a mano de una de ellas a quienes se ve ligado a través de una maldición que no le permite morir, de manera que cada vez que es asesinado, ingresa temporalmente a una especie de limbo o purgatorio, aguardando hasta que alguien toque físicamente su cuerpo, momento en el cual se sucede una especie de intercambio de almas que le permite regresar otra vez de entre los muertos.

No quiero arruinarle la maravillosa experiencia a quienes deseen leer este estupendo comic, por este motivo no mencionaré detalles de su argumento, sin embargo me gustaría comentar un poco sobre sus interesantes protagonistas.
Las principales familias que tienen supremacía en este peculiar universo son cuatro: Los Aligheri (claro homenaje a Dante y su Divina Comedia) gobernada por el demonio Alphonse Aligheri, Los Roarke (podría ser una referencia a la corrupta familia Roarke de Sin City de Frank Miller, a su vez una especie de tributo al gran Mickey Rourke y su Corazón Satánico, quiza su antecedente en cuanto al Noir Satánico) gobernada por el demonio Bruno Roarke, los siniestros y tenebrosos Verlochin, y Danny O’Brien, ex matón de los Aligheri, humano pero con una desmedida ambición que lo lleva a tratar de abrirse paso en un mundo dominado por demonios.

Asimismo, la historia presenta un bizarro triangulo amoroso entre Eddy, Danny y Sophie, la Femme Fatal de la historieta, que es a la vez querida del capo mafioso y amante de nuestro protagonista, con quien mantiene una extraña relación de amor/odio que los lleva a la cama a pesar de que el rostro de Eddy esta cruelmente marcado por las cicatrices y que su cuerpo ostenta todas las mutilaciones y estigmas de “sus muertes”, de manera que son el grotesco testimonio de su condición de cadáver ambulante, esto da pie a algunos hilarantes momentos, uno de mis favoritos es aquel en el que uno de los guardaespaldas de Alphonse los encuentra haciendo el amor y se burla de Eddy diciéndole con sarcasmo que hace falta que una mujer sea una pervertida para poder acostarse con un fenómeno de su tipo.

Realmente me enganche con mas de un personaje, siendo Alphonse Aligheri uno de mis favoritos, imponente y gigantesco demonio de cuernos astados, astuto, despiadado, poseedor de una descomunal fuerza física, me quede helado con las viñetas en la que somos testigos de su monstruoso poder físico puesto a prueba cuando se enfrenta en un estado de frenesí salvaje con toda una pandilla rival que viene a liquidarlo, resultando en una orgía de sangre en la que aniquila a sus rivales atravesándolos con sus cuernos o machacándoles los cráneos con sus formidables puños y de paso estampándolos contra la pared o contra el techo, mientras asimila con su cuerpo metralla de todo calibre; debo especificar que en la historieta los demonios no son inmortales, de hecho no se especifica a donde van a parar luego de su muerte pero los vemos morir tan igual como los humanos.

Otro personaje interesante es Tony, el taimado e irascible guardaespaldas de Alphonse, quien vive en continuo conflicto y rabioso intercambio verbal con Eddy, Tony es humano, por lo que las familias rivales no entienden como los Aligheri han nombrado como guardaespaldas principal a un humano en lugar de un demonio, haciendo continua sorna de este hecho, sin embargo Tony demuestra que tiene lo suyo en una tremenda escena en la que se enfrenta en combate cuerpo a cuerpo contra un gigantesco minotauro miembro de uno de los clanes rivales.

De las familias de demonios, aquella que logró absorber completamente mi atención, fue la siniestra familia Verlochin (a quien Eddy les debe su alma), seres infernales de lúgubre y fantasmal aspecto Lovecraftiano, es imposible ignorarlos cada vez que entran a escena, de hecho en todas las viñetas en las que aparecen, su pesadillesca presencia ocasionará mas de un escalofrío y sobresalto.

Asimismo el limbo a donde va Eddy cada vez que muere compone en si mismo una interesante mini historia y todo un enigma para el lector; el anfitrión de dicho mundo es una grotesca entidad que me recuerda al Gollum del Señor de Los Anillos, la cual se encuentra empeñada en conseguir que Eddy se quede allí permanentemente; me hipnotizó el ambiente onírico pero a la vez fantasmal y tenebroso contra el que tiene que enfrentarse temporalmente Eddy cada vez que muere, pues esta diseñado para que el lector pueda percibir su angustia en cada ocasión que va a parar a sus yermos páramos, sin embargo, …

En resumen estamos ante un magistral universo con muchas posibilidades, en el cual se mueve desesperadamente un protagonista que pareciera una fusión entre Lucca Torelli alias Torpedo y El Agente de la Agencia Continental de Dashiel Hammet, donde pululan villanos fríos y sanguinarios que me hicieron recordar al icónico Slim de “El Secuestro a Miss Blandish”, temerarios y leales guardaespaldas que no tienen nada que envidiarle a los legendarios Lucca Brassi y Rocco Lampone de “El Padrino”, espeluznantes y grotescos demonios de todos los colores y tamaños que harían palidecer de espanto al propio Hell Boy (los hay incluso hasta de 5 metros de altura), abominaciones e híbridos resultado del antinatural acoplamiento carnal entre humanos y demonios, humanos convertidos en aberraciones lovecraftianas fruto de ancestrales maldiciones aplicadas a manera de castigo, violencia hard boiled a raudales con sublimes toques gore, es decir todo un festín para el amante del noir y el horror clásico.

Finalmente, reproduzco el singular texto introductorio que abre la historieta, el cual marca acertadamente desde el inicio el tono de la misma:

“Déjame adivinarlo. Seguro que eres uno de esos tipos que cree que lo sabe todo. Te dedicas a tus trapicheos, te cobras unos cuantos favores inmerecidos y nunca haces promesas a menos que puedas sacar buena tajada. Bueno, pues voy a echarte una mano, voy a contarte un secreto, no el gran secreto, no te vayas a creer, …, lo que voy a decirte no es mas que la punta del iceberg.
Mira, te crees que eres el mas listo entre los listos, …, y a las familias les gustan los tipos como tu. Estas convencido de que conoces todos los trucos habidos y por haber y de que siempre podrás escabullirte de los problemas. Pero lo que no sabes es que estas enfrentándote a los estafadores más viejos que jamás hayan vestido traje de raya diplomática, y que siempre salen ganando en sus negocios. Lo se mejor que nadie. Yo era como tú.
Quizá piensas que si pude hacer unas cuantas jugarretas y vivir para contarlo, tu también podrías tener suerte. No te equivoques, mi situación no es afortunada en absoluto. Si todavía sigo aquí es por una y solo por una sola cosa: A veces, la única persona en la que puedes confiar es en un hombre muerto”.

Una cosa más, no me queda la menor duda de que esto se va directo a la pantalla grande.

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